
Antes de partir hacia Croacia, es importante averiguar algunas cosas básicas que harán que tu estancia sea más agradable y organizada: este país, con su impresionante costa, sus numerosas islas y su rico patrimonio histórico, merece una preparación cuidadosa.
En primer lugar, comprueba los documentos necesarios: los ciudadanos de la UE pueden viajar simplemente con un documento de identidad válido, mientras que los de otros países tendrán que llevar su pasaporte. La moneda oficial es el euro desde el 1 de enero de 2023, así que los que lleguen de la zona euro no tendrán que preocuparse por el cambio de divisas. La temporada ideal para descubrir Croacia es de mayo a septiembre, aunque julio y agosto coinciden con la temporada turística alta, que se caracteriza por costes más elevados y grandes aglomeraciones, sobre todo en los centros turísticos costeros y las islas.
Para viajar, el país ofrece una eficaz red de autobuses para desplazarse por el continente y numerosas conexiones en ferry a las distintas islas, con la recomendación de reservar con tiempo durante los meses de verano. Si quieres más autonomía para visitar las islas principales, la costa o las zonas del interior, considera la posibilidad de alquilar un coche.
La gastronomía croata merece un capítulo aparte. En los balnearios predominan los platos de pescado y marisco recién capturado, mientras que las zonas del interior ofrecen sabrosos platos de carne como el čevapčići y la peka. No te pierdas el prosciutto dálmata, los quesos producidos en la isla de Pag y las apreciadas trufas de Istria. Los vinos locales son de excelente calidad, con denominaciones prestigiosas como Plavac Mali y Malvasia, mientras que la rakija sigue siendo el aguardiente tradicional por excelencia.
El croata es la lengua del país, pero el inglés se habla mucho en los destinos turísticos. No obstante, será de agradecer que aprendas algunas expresiones básicas en croata. Respeta las tradiciones locales: los croatas son un pueblo acogedor que aprecia sus costumbres. Cuando visites iglesias y lugares sagrados, recuerda llevar ropa sobria.
En cuanto a la salud, los que tengan la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) pueden acceder a la atención médica esencial, pero se recomienda encarecidamente un seguro de viaje complementario. Recuerda que en los meses calurosos el sol puede ser especialmente intenso, sobre todo en las islas, así que no olvides una buena crema protectora.













