Split es la segunda ciudad más grande de Croacia y una parada imprescindible en unas vacaciones por carretera en el centro-sur de Dalmacia.
Merece la pena hacer una parada para visitar el espléndido Palacio de Diocleciano, una pequeña ciudad dentro de una ciudad construida con fina piedra blanca que crea un llamativo contraste con el color del mar.
Las playas están cerca y son fácilmente accesibles, pero Split tiene el atractivo de una ciudad más que de un balneario.
Pasea por las elegantes calles del centro y a lo largo del paseo marítimo y aprovecha las numerosas oportunidades de turismo cultural que ofrece Split, con sus prestigiosos festivales, eventos internacionales de cine y teatro y festivales folclóricos tradicionales.
Espléndida de día, cuando se pone el sol Split se convierte en la reina de la noche, con una amplia oferta de pubs, clubes y discotecas donde salir de fiesta hasta tarde.
La atracción más famosa de Split es el Palacio de Diocleciano. Forma el corazón palpitante de Split y es uno de los complejos arqueológicos romanos mejor conservados del mundo. Construido entre el 293 y el 305 d.C. como residencia imperial, este imponente palacio-fortaleza ocupa más de 30.000 metros cuadrados cercados por poderosos muros de hasta 26 metros de altura. Lo que lo hace extraordinario no es sólo su magnificencia arquitectónica, sino el hecho de que siga siendo un organismo vivo en el que residen hoy unas 3.000 personas.
La estructura original incluía una división entre la parte sur, dedicada a los apartamentos imperiales y las estancias de estado, y la parte norte, reservada a los sirvientes y las guarniciones militares. Esta división sigue siendo parcialmente legible en el plano actual. Las cuatro puertas monumentales denominadas según los metales preciosos (Aurea, Argentea, Ferrea y Bronzea) permiten el acceso al complejo desde todos los puntos cardinales.
En su interior encontrarás el majestuoso Peristilo, la plaza ceremonial rodeada de columnatas, la Catedral de San Doimus excavada en el antiguo mausoleo imperial, las mazmorras utilizadas como decorados de Juego de Tronos y un laberinto de callejuelas con tiendas, restaurantes y galerías de arte.
La Catedral de San Doimus representa una de las paradojas más fascinantes de la historia cristiana: el edificio construido originalmente como mausoleo del emperador Diocleciano, notorio perseguidor de los cristianos, se transformó en el siglo VII en una catedral dedicada a San Doimus, obispo mártir ejecutado por el emperador. Esta conversión simbólica completó una venganza póstuma cuando los cristianos retiraron el sarcófago de Diocleciano para sustituirlo por las reliquias del santo.
La estructura conserva la planta octogonal romana original, bordeada por 24 columnas monolíticas de granito importadas de Egipto. En su interior podrás admirar el púlpito románico del siglo XIII, magníficos altares barrocos y preciosos relieves escultóricos que, según se cree, representan los rostros de Diocleciano y su esposa Prisca.
El campanario, construido en estilo románico-gótico entre los siglos XII y XVI, se eleva 57 metros junto a la catedral. Subir los 183 peldaños de la estrecha escalera de caracol requiere esfuerzo, pero la vista panorámica de 360 grados de Split, el puerto y las islas dálmatas compensa con creces el esfuerzo.
El Peristilo forma la plaza central del Palacio de Diocleciano y es uno de los espacios urbanos más atmosféricos de Europa. En época romana, servía de patio ceremonial donde el emperador se presentaba ante sus súbditos, rodeado por la majestuosa columnata de granito rojo que aún bordea tres lados de la plaza. El pavimento original es parcialmente visible, mientras que las columnas conservan su monumentalidad a pesar de los dos mil años transcurridos.
En el lado oriental del Peristilo se encuentra una de las doce esfinges egipcias traídas de Egipto por Diocleciano, de más de 3.500 años de antigüedad y perfectamente conservada. Este artefacto representa el objeto más antiguo de Split. Durante los meses de verano, el Peristilo se transforma en un escenario natural donde se celebran conciertos y actuaciones, aprovechando las excepcionales cualidades acústicas del espacio.
La plaza está rodeada de cafés que ofrecen la oportunidad de sentarse en la escalinata romana mientras se toma una copa, una experiencia que permite percibir la continuidad entre el pasado y el presente. Al atardecer, cuando las piedras se tiñen de un cálido color miel y las sombras alargadas crean juegos de luz, el Peristilo revela toda su magia.
El edificio que hoy alberga el Baptisterio tuvo su origen en el Templo de Júpiter, parte integrante del complejo religioso imperial construido por Diocleciano. La transformación en baptisterio cristiano tuvo lugar a principios de la era cristiana, cuando la necesidad de convertir espacios paganos en lugares de culto cristiano llevó a la reutilización inteligente de estructuras existentes. En el siglo XIII se colocó aquí la pila bautismal originaria de la catedral, una obra maestra de la escultura medieval que aún hoy se utiliza para los bautizos.
A la entrada del baptisterio hay otra esfinge egipcia, sin cabeza pero impresionante por el tamaño y la calidad de su escultura de granito negro. El interior conserva restos de decoración antigua y medieval, con un artesonado que data del periodo de conversión cristiana. El pequeño espacio del edificio crea una atmósfera íntima y acogedora, en marcado contraste con la monumentalidad del Peristilo exterior. Las paredes muestran restos de antiguos frescos y la puerta de entrada está decorada con elaboradas tallas de madera que datan del siglo XIII.
La Riva representa la buena sala de estar de Split, el paseo verde donde los habitantes de Split y los turistas se reúnen para pasear, tomar un aperitivo o simplemente disfrutar de la vista del puerto. Este amplio paseo peatonal bordeado de palmeras se extiende a lo largo de la costa sur del casco antiguo, separando las antiguas murallas del Palacio de Diocleciano del Adriático. Las reformas de 2007 transformaron la Riva en uno de los espacios públicos más elegantes de Dalmacia, con pavimento de piedra blanca que refleja la luz del sol y crea un ambiente mediterráneo.
A lo largo de la Riva hay cafeterías, heladerías y restaurantes con mesas al aire libre donde puedes disfrutar de especialidades locales mientras observas el bullicio de la gente. El paseo cobra vida sobre todo al atardecer y en las noches de verano, cuando actúan músicos callejeros y artistas, creando un ambiente festivo. Desde el paseo hay una vista espectacular del puerto con los transbordadores que parten hacia las islas Dálmatas, los veleros amarrados y las montañas Mosor que se elevan en el horizonte.
La Riva es también el punto de partida de excursiones en barco, visitas al puerto y conexiones con las islas. Durante el verano, acoge actos culturales, mercados y manifestaciones que atraen a miles de personas, confirmándola como el corazón de la vida social de Split.
La monumental Estatua de Gregorio de Nin, obra del famoso escultor croata Ivan Meštrović creada en 1929, se alza imponente frente a la Puerta Dorada del Palacio de Diocleciano. Con aproximadamente 8 metros de altura, la estatua de bronce representa al obispo medieval Grgur Ninski, figura clave de la historia croata por haber promovido el uso de la lengua eslava y la escritura glagolítica en los servicios religiosos, oponiéndose al uso exclusivo del latín impuesto por Roma.
La representación de Meštrović es poderosa y dramática: el obispo está atrapado en un momento de reflexión u oración, con sus vestiduras cayendo en pliegues monumentales y una expresión de determinación en el rostro. Una tradición muy apreciada por los visitantes es que frotar el dedo gordo del pie izquierdo de la estatua trae buena suerte, y de hecho se puede ver cómo el dedo está pulido por el contacto continuo de miles de manos.
La estatua no siempre estuvo en esta posición: colocada originalmente en el Peristilo, fue trasladada durante el periodo de la II Guerra Mundial y finalmente recolocada en su ubicación actual en 1957. La plaza donde se alza la estatua sirve de punto de encuentro y orientación para los visitantes, marcando el límite entre el casco antiguo medieval y la entrada norte del palacio.
La Galería Meštrović es uno de los museos de arte más importantes de Croacia, dedicado íntegramente a las obras de Ivan Meštrović, considerado el escultor croata más importante del siglo XX. Ubicada en una elegante villa neoclásica diseñada por el propio artista como residencia en la década de 1930, la galería está situada en una colina que domina Split y ofrece espléndidas vistas panorámicas del mar.
En 1952, Meštrović donó generosamente la villa y 132 obras de arte al pueblo croata, sentando las bases para la creación de la galería museo. La colección expuesta abarca toda la producción del artista: esculturas en mármol, bronce y madera, dibujos, planos arquitectónicos y bocetos preparatorios. Las obras dan testimonio de la evolución estilística de Meštrović, desde las influencias clásicas y de la Secesión vienesa hasta obras más maduras caracterizadas por un lenguaje monumental y poderoso. Especialmente impresionantes son las esculturas religiosas que muestran la profunda espiritualidad del artista.
También forma parte del complejo del museo la cercana iglesia de Kaštilac, decorada con tallas de madera que representan escenas de la vida de Jesús. La galería se encuentra fuera del centro histórico, pero es fácilmente accesible en autobús o dando un agradable paseo junto al mar.
La colina de Marjan es el pulmón verde de Split, un oasis natural de 178 m de altura que se adentra en el mar al oeste del casco antiguo. Este parque forestal de más de 300 hectáreas ha sido declarado reserva natural y ofrece una escapada del bullicio urbano a pocos minutos a pie del Palacio de Diocleciano. Los senderos que serpentean entre pinos carrascos, cipreses y matorral mediterráneo son populares entre corredores, ciclistas y familias que buscan sombra y aire fresco en los calurosos días de verano.
Desde la cima de Marjan hay una vista espectacular de Split, las islas circundantes y la costa dálmata que se extiende hasta donde alcanza la vista. Varios miradores bien equipados te permiten detenerte a contemplar el paisaje, mientras que pequeñas capillas e iglesias medievales salpican el parque, testimonio del papel espiritual que esta colina ha desempeñado siempre para los habitantes de Split. En el lado occidental se encuentran algunas de las playas más hermosas de Split, como Kašjuni y Bene, a las que se llega por senderos que descienden abruptamente hasta el mar.
La colina alberga también un pequeño zoo, campos deportivos, un centro de escalada y cafés panorámicos. Un sistema de senderos bien señalizados permite realizar excursiones de dificultad variable, desde sencillos paseos por la costa hasta senderos más desafiantes que atraviesan todo el parque. Marjan es especialmente mágico al atardecer, cuando la luz rasante transforma la vegetación y el mar en un espectáculo de colores.
El Mercado Verde de Split, conocido localmente como Pazar, es el corazón palpitante de la vida cotidiana de la ciudad y una auténtica experiencia que no deben perderse los visitantes. Situado justo delante de la Puerta de Plata del Palacio de Diocleciano, este animado mercado al aire libre funciona todas las mañanas desde el amanecer hasta primera hora de la tarde, ofreciendo un caleidoscopio de colores, olores y sabores dálmatas.
Los puestos rebosan de productos locales: frutas y verduras de temporada cultivadas en las cercanías, quesos artesanales del interior de Dalmacia, aceite de oliva virgen extra deIstria y las islas, miel perfumada con hierbas mediterráneas, lavanda seca, jamón y tocino ahumados según antiguas recetas. El pescado fresco, capturado la víspera en el Adriático, ocupa una sección específica donde encontrarás lubina, dorada, langostinos y el famoso brudet (sopa de pescado) que preparan algunos puestos.
El mercado también ofrece productos artesanales: cestas tejidas, bolsas de lavanda, jabones hechos a mano y objetos de madera de olivo. Visitar el Pazar a primera hora de la mañana significa sumergirse en la autenticidad de Split, observar la dinámica social local y quizá comprar ingredientes para un picnic en la playa o un aperitivo en un apartamento.
La Plaza del Pueblo, llamada simplemente Pjaca por los habitantes de Split, forma el centro de la ciudad medieval y es un importante hito histórico y social. Esta plaza alargada se desarrolló fuera de las murallas del Palacio de Diocleciano durante el periodo medieval, cuando Split empezó a expandirse más allá de los confines de la fortaleza romana. Rodeada de elegantes palacios góticos y renacentistas, Pjaca es testigo de los siglos de dominio veneciano a través de su arquitectura que recuerda a la Serenísima.
En el lado norte de la plaza se alza el Ayuntamiento de estilo gótico, que hoy alberga el Museo Etnográfico, mientras que laantigua torre del reloj sigue marcando la hora de la ciudad con su mecanismo medieval. Arcos venecianos y frisos renacentistas decoran las fachadas de los edificios que rodean la plaza, creando un ambiente elegante que recuerda los orígenes adriáticos comunes de Venecia y Split. El pavimento de piedra blanca refleja la luz del sol, mientras que los cafés y restaurantes con mesas al aire libre te invitan a hacer una pausa y observar el ajetreo diario.
Pjaca cobra vida especialmente durante los mercados de temporada, cuando los puestos de artesanía y especialidades gastronómicas llenan el espacio, creando un ambiente festivo. En verano, la plaza acoge conciertos y actos culturales, lo que la confirma como uno de los espacios públicos más animados del Casco Viejo.
El Museo de Juego de Tronos es una atracción imprescindible para los fans de la popular serie de TV de HBO. Situado en una villa histórica a lo largo de Šetalište Ivana Meštrovića, cerca de la Galería Meštrović, el museo exhibe una rica colección de trajes, armaduras, armas y atrezo originales utilizados en el rodaje.
Puedes admirar de cerca las ropas que llevan protagonistas como Daenerys Targaryen, Cersei Lannister y Jon Nieve, explorar fieles reconstrucciones de entornos icónicos de la serie e incluso sentarte en una réplica del Trono de Hierro para hacerte la foto de recuerdo perfecta. La exposición se enriquece con paneles explicativos que cuentan los entresijos del rodaje en Split y otros lugares de Croacia, como Dubrovnik, con mapas que ilustran dónde se rodaron las escenas más memorables.
Especialmente interesantes son las secciones dedicadas a los efectos especiales y a los procesos de creación de trajes y armas, que revelan la meticulosa artesanía que hay detrás de la producción. El museo también ofrece experiencias interactivas con pantallas táctiles y vídeos exclusivos con entrevistas al reparto y al equipo. La visita dura aproximadamente una hora y es un complemento perfecto de la visita a las localizaciones de Split utilizadas para representar Meereen.
La ciudad de Split alberga hermosas playas, tanto de arena como de guijarros, bañadas por un mar verdaderamente cristalino que ha recibido repetidamente el título de Bandera Azul. Esta parte de la costa croata se caracteriza por el viento mistral, que sopla suavemente y hace que sea agradable y no demasiado caluroso estar en la playa.
Muchas de las playas de la ciudad son populares entre las familias con niños porque son de fácil acceso (en coche o a pie), tienen fondos marinos de pendiente lenta y disponen de playas con todos los servicios. La costa de Split se extiende a lo largo de casi 10 km en la parte más meridional de la ciudad, desde el puerto hasta el pueblo de Podstrana, mientras que alrededor del monte Marjan hay numerosas playas rocosas rodeadas de verde vegetación.
La playa de Bačvice es la más famosa y popular de Split, situada a sólo 10 minutos a pie del casco antiguo por el paseo marítimo que continúa desde la Riva. Esta playa de arena con poca profundidad y bajíos graduales es especialmente popular entre las familias con niños pequeños y quienes desean nadar en aguas tranquilas. La bahía resguardada ofrece protección contra los vientos, garantizando un mar tranquilo incluso cuando otras playas están agitadas.
Bačvice es famosa no sólo por sus cualidades para el baño, sino también por ser la cuna del picigin, un deporte acuático típico de Split que consiste en mantener en el aire una pelota pequeña golpeándola con las manos mientras se está en aguas poco profundas. Durante el verano puedes ver a equipos de jugadores realizar espectaculares acrobacias, y cada enero se celebra el campeonato mundial de picigin, que atrae a equipos de toda Croacia.
La playa está totalmente equipada con tumbonas y sombrillas de alquiler, duchas, vestuarios y aseos. El paseo marítimo a lo largo de Bačvice está repleto de cafeterías, heladerías, restaurantes y chiringuitos que permanecen abiertos hasta altas horas de la noche en verano, convirtiendo la playa en uno de los centros de la vida nocturna de Split. La zona es especialmente popular entre los jóvenes, que se reúnen aquí para tomar aperitivos al atardecer y fiestas nocturnas. Bačvice ha sido galardonada con la Bandera Azul, una certificación internacional que garantiza la calidad del agua y de los servicios ofrecidos.
Otras playas populares son Ovcice y Firule, que se caracterizan por playas de arena y guijarros, aguas poco profundas y numerosos restaurantes. A los jóvenes, por su parte, también les encanta frecuentar la playa de Kastelet, situada al pie del monte Marjan y que es una playa de guijarros con varios clubes a pie de playa que ofrecen bocadillos, bebidas y entretenimiento musical.
Aproximadamente a 1,5 km al sur de la playa de Ovcice está la playa de Znjan, de reciente creación, que se extiende a lo largo de 1 km con zonas de arena, guijarros y piedras. Znjan tiene lidos bien equipados, bares, servicios e incluso un gran aparcamiento, y es una parte muy bonita y moderna de Split.
En el siguiente mapa puedes ver la ubicación de los principales lugares de interés de este artículo.
Por su ubicación, Split es una base ideal para explorar tanto el centro como el sur de Dalmacia.
Los operadores turísticos locales organizan numerosas excursiones y viajes de un día a la Cueva Azul de Bisevo, las cascadas de Krka y la famosa playa de Zlatni Rat, en la isla de Brac. Otra excursión popular es un viaje en canoa por el río Cetina.
Si quieres quedarte en la ciudad, hay muchas oportunidades de ocio y relajación, con atracciones temáticas para niños, balnearios y baños termales, instalaciones deportivas y tiendas.
Como gran ciudad, Split ofrece muchas más oportunidades de actos culturales y entretenimiento que otros destinos turísticos más pequeños.
Todos los años se celebran numerosos actos y festivales que atraen a un público internacional cada vez mayor, desde prestigiosos festivales de música clásica a festivales de música electrónica de vanguardia, así como ferias, festivales de cine, teatro y danza, acontecimientos deportivos y fiestas tradicionales.
Entre los acontecimientos anuales más importantes de Split están el Split Summer, el Festival de Cine Mediterráneo, el Ultra Music Festival, el Cro Patria, el Festival de Cine de Split y el Salón Náutico de Croacia.
Si estás en la ciudad en junio, no te pierdas el campeonato mundial de picigin, un extraño deporte típico de Split en el que los jugadores compiten en el mar lanzando una pelota que nunca debe tocar el agua
En mayo hay dos importantes fiestas tradicionales, la Fiesta de San Doimus y la Fiesta de la Santa Cruz.
Los amantes de la vida nocturna encontrarán bares y discotecas abiertos todo el año en Split, pero es en verano cuando la vida nocturna de Split se desmadra, con varios clubes abiertos en la playa o a lo largo del paseo marítimo.
Las veladas suelen comenzar en uno de los bares del centro para tomar una copa con los amigos, y luego continúan hasta bien entrada la noche en uno de los numerosos pubs, clubes o discotecas de la ciudad.
Los paseos en barco por la costa de Split son una forma agradable de ver la ciudad desde una perspectiva diferente. Numerosos operadores turísticos de la Riva ofrecen recorridos panorámicos por el puerto y la costa urbana, que te permiten ver el Palacio de Diocleciano y el casco antiguo desde el mar.
Especialmente populares son los cruceros al atardecer que navegan por el paseo marítimo con un aperitivo a bordo, ofreciendo vistas espectaculares de la ciudad iluminada. Durante el verano, las fiestas en barco animan el puerto de Split: barcos de fiesta con DJ, barra libre y música en directo navegan por las aguas de la ciudad, creando un ambiente festivo sin alejarse demasiado de la costa.
La ciudad de Split no es muy grande, pero ofrece a sus visitantes una amplia gama de opciones de alojamiento. Sin embargo, elegir dónde alojarse en la ciudad no es fácil, porque todo depende del tipo de vacaciones que quieras pasar.
Quienes deseen estar cerca de la playa pueden alojarse en el barrio de Bacvice, que no sólo permite acceder fácilmente al mar, sino también al centro de la ciudad en pocos minutos a pie. Otras zonas donde alojarse para estar cerca de las playas son Znjan, un barrio con muchos hoteles, restaurantes y discotecas, y Trstenik.
En cambio, si planeas un viaje más cultural, te recomendamos dormir en la zona del casco antiguo, donde encontrarás la ciudad vieja y numerosos lugares de interés para visitar.
Split es el eje principal de Dalmacia central y es un punto de visita obligada para quienes exploran la costa y las islas croatas.
Desde el aeropuerto de Split, situado a unos 25 km del centro de la ciudad, en Kaštela, puedes llegar al centro de Split con varias opciones. El autobús lanzadera (Pleso Prijevoz) sale coordinado con las llegadas de los vuelos y tarda unos 30-40 minutos en llegar a la estación central de autobuses. Los taxis del aeropuerto al centro cuestan 30-40 euros y tardan 25-30 minutos. Para quienes viajen en grupo, puede ser conveniente reservar un traslado privado con antelación.
Si llegas por mar en los ferrys que conectan Split con islas dálmatas como Brač, Hvar, Vis y Korčula, el puerto está a sólo 5-10 minutos a pie del centro. Al salir de la terminal, dirígete hacia el paseo marítimo (Riva) y desde allí verás enseguida las murallas del Palacio de Diocleciano.
Los que lleguen en coche deben tener en cuenta que el centro de la ciudad está cerrado al tráfico. Los aparcamientos más cercanos son el subterráneo bajo la Riva (Garažna ulica) y el aparcamiento Matoševa. Las tarifas son bastante elevadas, así que si vas a quedarte varios días considera la posibilidad de dejar el coche en aparcamientos periféricos más baratos y utilizar el transporte público. Para los que lleguen desde Zagreb (unos 380 km, 4 horas de viaje), la autopista A1 conecta directamente las dos ciudades por un peaje de unos 20 euros.
Los autobuses interurbanos llegan a la estación central (Autobusni kolodvor), situada a 1,5 km del palacio. Desde aquí, puedes tomar los autobuses locales números 1, 2, 3 ó 4, que te llevan cerca del centro histórico, o caminar 15-20 minutos. Split está bien comunicada por autobús con las principales ciudades croatas y destinos internacionales.
¿Qué tiempo hace en Split? A continuación se muestran las temperaturas y previsiones meteorológicas en Split durante los próximos días.
Split es la segunda ciudad de Croacia en cuanto a población, después de la capital, Zagreb. Está situada en la parte meridional del país, frente a las costas de las islas de Solta y Brac.
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